La exesposa de Hunter Biden, hijo del actual presidente de Estados Unidos, y una exnovia de este, declararon acerca de la adicción y gastos de este, quien fue sometido a juicio el fin de semana debido a que afirmó que no era adicto en el formulario federal para comprar un arma de fuego en el año 2018.
Kathleen Buhle, quien fue esposa del hijo de Joe Biden por casi 25 años y con quien procreó tres hijas, recordó el momento en el que descubrió una pipa de crack en un cenicero en julio del año 2015 y la respuesta de su entonces marido fue admitir su adicción a la droga.
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Detalló que registraba el automóvil de su esposo buscando crack antes de dejar que sus hijas lo usaran con el fin de asegurarse de que no iban en un auto con drogas.
Luego de su testimonio, los 12 miembros del jurado igual escucharon a Zoe Kestan, exnovia de Hunter Biden, quien dijo que él era un encantador derrochador al que le gustaba la buena vida de fiesta en Nueva York, según el medio The New York Times.
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Hunter Biden conoció a Kestan en un club para hombre en el año 2018 y según la bailarina, ambos conectaron inmediatamente, y aseguró que trató de ayudarle muchas veces a estar sobrio e incluso le vio fumar crack de manera repetida e incluso que arrancaba pequeños cristales de una enorme roca de crack del tamaño de una pelota de ping-pong.Igualmente Gordon Cleveland, empleado de la armería donde Biden consiguió el arma en el año 2018, fue testigo y dijo que este no dudó en decir que no a la pregunta de si era consumidor ilegal o adicto a la marihuana o cualquier estimulante, narcótico u otra sustancia controlada, hecho que es clave en el juicio que empezó el jueves en Delaware.